viernes, 1 de diciembre de 2017

ni pobres ni ricos


Tono y Mihura escriben a cuatro manos en el San Sebastián de la retaguardia la comedia Ni pobre ni rico, sino todo lo contrario. La obra tuvo una primera adaptación -muy poco fiel al espíritu del humor nuevo que la animaba- a finales de 1945, debida al ímpetu fagocitador de Ignacio F. Iquino. El desastre crítico y de público fue mayúsculo. Pero la hecatombe no pareció desanimar a los productores mexicanos que compraron los derechos para una nueva adaptación en 1951, dirigida por Fernando Cortés con el título de Ni pobres no ricos.

La distancia que toma respecto al original es tal que cambia incluso de sexo a su protagonista, convertida por arte de magia azteca en una millonaria mexicana enamorada de un mensajero e inquieta sobre la igualdad social y la lucha de clases (!). Y es que Ni pobres ni ricos retoma algunas de las ideas más rocambolescas del argumento original para insertarlas en una historia que convierte el cóctel de humor absurdo y lirismo en spot publicitario de largo metraje.

Un malentendido inicial –la millonaria excéntrica (Gloria Marín) que se hace pasar por criada de su propio mayordomo (el exiliado español Ángel Garasa)– pone en marcha una trama de guerra de sexos y clases cuando el secretario general de un sindicato socialista (Abel Salazar) se despierte, tras una noche de farra, casado con ella. La decisión del joven de reciclarse en hombre-anuncio de Pepsi-Cola o la compra de productos de determinadas marcas por parte de la enamoradísima esposa empeñada ƒen deshacerse de su fortuna –y publicitar de paso dichos productos– se entretejen durante el segundo acto con un ramillete de escenas extraídas directamente de la comedia. Al menos, así se intuye de la sinopsis y comentario elaborados por el historiador Emilio García Riera (Historia Documental del Cine Mexicano, vol. 5 (1952-1954). Ediciones Era, México D.F., 1973.).

Por citar, en Ni pobres ni ricos se cita nada menos que a Marx y a Gorki, aunque la película concluye con una tesis tan bienintencionada como inane: no deberían existir ni pobres ni ricos, «sino un mundo mejor».

Adiós a «todo lo contrario».

2 comentarios:

  1. Hola ¿dónde puedo conseguir la película de Abel Salazar y Gloria Marín?

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    1. Nosotros no hemos podido verla. El dearrollo argumental procede, como decimos en la entrada, de la Historia Documental del Cine Mexicano de García Riera.

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